Marco Díaz
Culiacán, Sinaloa, a 4 de agosto de 2019. _ La agricultura de México, y de Sinaloa, atraviesa una difícil situación ante la segregación que el gobierno federal determinó hacer hacia los productores ‘fifís’, aquellos que se dedican a la agricultura comercial y de exportación, quienes han quedado fuera de la mayoría de los programas de bienestar de esta administración.
A lo anterior, se le debe de sumar el desmantelamiento de las instituciones como la Comisión Nacional del Agua, la misma Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente, e incluso el embate en contra de las organizaciones campesinas.
Durante su visita a Sinaloa, el diputado federal y presidente de la Comisión de Agricultura en el H. Congreso de la Unión, Eraclio Rodríguez, confirmó lo anterior al señalar que Chihuahua y Sinaloa deberán encabezar los esfuerzos por impulsar una reestructura que beneficie a la producción del campo mexicano, como parte de un movimiento nacional.
El legislador federal confirmó también que existe una guerra al interior de la SADER, entre el titular Víctor Villalobos, y el subsecretario de autosuficiencia alimentaria, Víctor Suárez.
Esta situación ha dejado como consecuencia una pasividad operativa que ya alcanzó a los productores de Sinaloa, quienes fueron ‘descobijados’ por ASERCA durante el proceso de comercialización de la cosecha 2019, siendo afectados con cobros de hasta 350 pesos por tonelada, supuestamente por manejo y administración de Agricultura por Contrato.
Sí, afirmó Eraclio, se pudo prever la problemática antes mencionada y se perdió una oportunidad millonaria que alcanzaría 6 mil 400 millones de pesos, al considerar la diferencia que deberá pagar el gobierno federal para el Ingreso Objetivo. Algo que se pudo haber evitado.
Y si lo antes mencionado no fuera suficiente, durante la asamblea de campesinos y uno que otro acarreado, que se llevó a cabo este domingo en un centro de acopio de productores, se dio un enfrentamiento verbal entre el dirigente de la Unión Agrícola Regional de Sinaloa (UARS), y un asistente.
Durante su participación, ante más de 200 personas, el líder campesino acusó de ‘cul…nes’ a quienes le señalaban en ese momento. La situación se tensó todavía más una vez que el productor que gritaba en contra de los líderes ahí presentes, se acercó a encarar a Vargas Ramírez.
“Tenemos diferencias sí, pero es más el odio que el amor, es más grande el pinche odio que el amor, para que la agricultura crezca ustedes tienen la respuesta, no nosotros. Yo termino diciéndoles algo… siempre hemos tenido gritones que quieren distorsionar la unidad, pero déjenme decirles algo, juntos… si ponemos la rentabilidad, el progreso y el desarrollo y luchamos juntos podemos transformar Sinaloa.
Nadie es tan puro que pueda señalar a otro, ni Andrés Manuel es tan puro ni tan honesto que pueda señalar a otro. Y aquí yo he visto productores que jamás han pisado la cárcel, que jamás ha corrido peligro su vida, ah pero que bueno son para gritar, ¡que buenos, son culones en los hechos y hablan en los mítines!”, expresó Serapio Vargas.
Dicha situación no pasó a mayores, pero fue una de las tantas que se presentaron durante la asamblea, en donde tampoco permitieron finalizar su discurso al líder al representante de la Coordinadora Única de Productores, David Rubio.
¡Que hable el que sigue!, ¡Ya siéntate!, ¿Y los líderes dónde están?, ¡Háblennos con respeto!, fueron algunas de las exigencias de los presentes.
Así transcurrió una reunión en donde los anuncios más importantes, como la probabilidad del pago del complemento para el ingreso objetivo del maíz en septiembre próximo, pasaron de noche. Y la unidad, esa también se desvaneció tenuemente.
