El Centro de Reproducción de Insectos Benéficos de la Junta Local de Sanidad Vegetal tiene capacidad para atender al 100% de la superficie del ‘Corazón Agrícola de México’
José Sauceda
Guasave, Sinaloa._ El laboratorio de reproducción de insectos benéficos se creó en 1970 con aportaciones de los productores de algodón para contrarrestar los daños del gusano bellotero que llegó a Sinaloa desde Riverside, California.
Históricamente ejemplar en su tipo a nivel nacional, el laboratorio actualmente tiene capacidad para más de 190 mil hectáreas, desde el Cerro de Batequis hasta la colindancia con Salvador Alvarado.
Juan de Dios Santos Soto, presidente del organismo fitosanitario informó que para lograr lo anterior se realizaron inversiones por el orden de los dos millones de pesos, con participación del gobierno federal.
Dijo que se cuenta con un proyecto integral que comprende una inversión total de 17 millones de pesos aproximadamente, a través del cual se busca atender a la superficie que comprende al ‘Corazón Agrícola de México’.
“Se liberan trichogramma y se liberan crisopas, es un megaproyecto donde viene plasmado las salas que ocupamos, que son unas 8 más, así como microscopios para conocer problemas virosos en la semilla de frijol, como lo ha pedido la SADER”.
Santos Soto explicó que se pretende construir un silo para almacenar granos para los insectos benéficos, así como un hangar, una sala de juntas, una oficina para técnicos, así como un área refrigerada para los propios insectos benéficos y una planta de luz.
Capacidad
Maximiliano Gerardo Aguilar, director técnico del Centro de Reproducción de Insectos Benéficos de la Junta Local de Sanidad Vegetal del Municipio de Guasave, informó que para el mes de septiembre inicia la temporada de hortalizas y con ello la JLSVMG la liberación en avión ligero de crisopas.
“Los principales cultivos iniciales son tomate, tomatillo, lo que hay en la región. El beneficio es que este centro evite las aplicaciones excesivas de insecticidas. Se busca que este insecto se reproduzca y parasite a las plagas para disminuir las aplicaciones que en ocasiones eran de 24 y disminuyeron hasta 6”.
El técnico aseguró que actualmente hay productores que aprovechan los insectos benéficos y de antemano no utilizan insecticidas en su campo.
Proceso
Gerardo Aguilar detalló que se utiliza trigo como base para alimentar la sitotroga que, junto a los huevesillos de crisopa, se liberan en campo ya sea por parte de los productores o bien, a mediante el avión ligero de la propia Junta.
“El beneficio de usar el avión ligero es que es más rápido y le damos vuelta a la superficie, es una ventaja”.
Cabe señalar que los insectos benéficos como tal no tienen un costo para el productor, pues éste se incluye en el permiso de siembra que de antemano paga.
