Riego por goteo ¿en maíz?.

El uso de esta tecnología permite ser eficiente en el uso de fertilizantes, así como incrementar la producción en hasta un 50%

Ing. Leonardo Lugo Gaxiola

Twitter: https://twitter.com/nalolugo

Recordando aquel Febrero de 2011, donde una helada siniestró prácticamente la totalidad de cultivos de maíz en Sinaloa, y ante la necesidad de resembrar todo el estado, ese año anticipadamente empezamos a tener una probada de lo que sería hacer agricultura enfrentando un escenario de sequía severa, al haber agotado prácticamente toda la reserva de agua de nuestras presas.

Fue entonces, en medio de una escasez de agua y un programa limitado a aproximadamente 350,000 hectáreas de maíz en el estado, cuando escuchamos en la región las primeras experiencias de riego por goteo en maíz en Sinaloa.

A través del tiempo con muchos altibajos en el negocio maicero, la tecnología de goteo ha tenido muchos vaivenes, hay quienes se quedaron con ella y otros la abandonaron. Las causas son muchas, en esta ocasión nos enfocaremos en el cómo hacer posible una producción rentable de maíz con riego por goteo y qué condiciones tienen o se deberían tener para llevarla a cabo.

Con la experiencia vivida en los últimos 10 años, concluimos que el goteo para maíz no es para todos, la producción de maíz bajo este sistema requiere que se den un conjunto de condiciones para que sea viable, y algunas de ellas fuera las manos del productor. A continuación, las enlistaremos:

Disponibilidad de agua: El campo a tecnificar debe estar en una zona donde el agua no sea limitante, y que no requiera mucha gestión con el módulo de riego/canalero para la programación de riego, ya que la producción con goteo requiere de una aplicación periódica de agua al cultivo.
Dimensión del proyecto: La rentabilidad de la producción vendrá muy asociada al tamaño del proyecto, ya que esto ayudará a reducir el costo por hectárea del sistema, ese punto de arranque lo identificamos en proyectos de lotes compactos de al menos 20-30 hectáreas.
Diseño hidráulico: El proyecto de riego debe ser diseñado por un profesional, que conozca las necesidades del productor, las condiciones físicas del terreno, limitantes de la fuente de agua, marco de siembra y trazo de surco original de los terrenos, todo esto para que elabore una propuesta viable en términos económicos y operativos para el agricultor. Como recomendación, nunca caer en un proveedor “patito” de riego.
Acceso a energía eléctrica: Los equipos de riego deben diseñarse con bombeo eléctrico, ya sea con estación fija o móvil, el costo de bombeo eléctrico es mucho más barato que hacerlo con diésel, además se puede tener una tarifa preferencial de bombeo muy económica.
Capacidad productiva del terreno: Las condiciones de suelo que mostrarán un incremento sustancial en la producción de maíz, siempre serán aquellos de fertilidad media, o lotes con un relieve castigado que no permite una buena aplicación de riego por gravedad, es conocido muchos lotes llevados de un promedio de 10-12 ton/ha hasta 16-18 ton/ha con riego por goteo.
Mano de obra: El sistema de riego por goteo requerirá mano de obra extraordinaria para la instalación de regantes y su retiración, además de un personal que deberá ser capacitado por el proveedor de riego para la operación y mantenimiento del sistema.

Ahora, en términos muy prácticos, ¿qué es lo que hace o debe de hacer un productor en su manejo de cultivo para lograr altos rendimientos con riego por goteo y tener una mayor rentabilidad que con el sistema de riego por gravedad?

Contar con asesoría profesional en temas de riego y nutrición vegetal
Migrar hacia sistemas que reduzcan la labranza, con la finalidad de optimizar costos de preparación y aumentar paulatinamente la fertilidad del suelo
Respetar la fecha de siembra óptima de su zona
Utilizar siempre los híbridos de mayor calidad (desempeño, adaptación y estabilidad)
Evitar utilizar densidades de siembra muy altas
Enfoque en una buena calidad de siembra (distanciamiento equidistante entre semillas y emergencia uniforme de plantas)
Familiarizarse con la siembra en seco, ya que optimiza agua y además ayuda a aumentar el rendimiento
No sobrefertilizar y utilizar fuentes económicas de fertilización, la nobleza del sistema permite reducir las dosis de fertilización con nitrógeno en la mayoría de los casos, y se puede convivir muy bien entre el fertirriego y la aplicación de fertilizantes en banda como presiembra.
Programar la frecuencia de riego acorde a la textura y condición del suelo, normalmente cada 7-10 días se recomienda hacer aplicación de agua.
La instalación y recolección cuidadosa de la cinta de riego, además de los lavados periódicos, eso ayuda a aprovechar hasta 2 temporadas una cinta de riego de pared delgada (económica).

Tomando en cuenta lo anterior, podemos llamarle a esto: la formula ganadora. Con ello el productor puede producir hasta 50% más maíz en lotes de producción promedio, sin aumentar sustancialmente costos de producción más allá de la inversión del sistema y la reposición de las cintas.

Por fortuna, a pesar de los altos costos de los fertilizantes, un contexto de maíz por encima de los $5,500 pesos por tonelada ($275 USD/Ton), dan para repensar en inversiones de riego por goteo, eso valorando todas las condiciones mencionadas que darán viabilidad económica al proyecto y harán práctica la aplicación del riego por goteo.

En conclusión, la necesidad económica o la misma escasez de agua nos irá orillando a tecnificar el riego en cualquiera de sus modalidades, y podemos sentirnos afortunados de ser una región reconocida a nivel nacional e internacional por emprender en el reto de producir maíz bajo riego por goteo desde hace más de diez años, de cierta manera en Sinaloa hoy día lleva delantera en el desarrollo del manejo integral del cultivo de maíz con fertirriego, una razón más para sentirnos orgullosos de ser agricultores sinaloenses a pesar de los retos a las que nos enfrentamos ciclo tras ciclo.