En el estado dejarán de circular unos 10 mil millones de pesos, como resultado de una política pública discriminatoria hacia los productores agrícolas
Redacción | Twitter @Comentarios_Sin
Culiacán, Sin., 24 de julio de 2023._ La base productiva de alimentos básicos en México ha sido severamente golpeada en este ciclo de cosechas 2023, donde por política federal quedaron sin precio de garantía tanto Sociedades de Producción Rural, como productores considerados «ricos» o «medianos» por haber establecido más de 15 hectáreas de maíz.
En Sinaloa se estableció un programa de precios de garantía para maíz por $6,965 por tonelada, considerando una producción de 11 toneladas por hectárea en promedio, pero dejando fuera a pequeños productores con permisos de siembra extemporáneos, o alguna situación con su papeleo que no le permitió acceder al registro en tiempo y forma.
A través de dos esquemas, se ha asegurado el pago de tan solo 1.5 millones de toneladad de maíz, de las 6 millones de toneladas que el estado produjo este año.
Asimismo, son cientos de pequeños productores en todo el estado quienes siguen con la esperanza de acceder al programa, algunos de ellos, a la fecha ya están pagando intereses pues con los precios de liquidación que algunas bodegas ofrecen, de entre $4,400 hasta $5,100 por tonelada «las cuentas no les salen».
Pero la esperanza muere al último, dice el dicho, y en la seguna compra de 500 mil toneladas por parte de Segalmex, se podría integrar a esos pequeños productores, e incluso se abre la posibilidad de dar el beneficio a personas morales con pequeña superificie.
Pero hay un grupo del que nadie habla, son la base productiva por encima de 20 hectáreas, quienes siguen esperando a que el mercado reaccione para liquidar sus cosechas, mientras puedan aguantar.
La política discriminatoria del gobierno federal y en la que jugó parte el gobierno del estado, pone en riesgo su productividad y su permanencia en la agricultura.
Y es que esta ola alimentada por la especulación, los aranceles a la exportación, la gran importación de granos a México, y un tipo de cambio desfavorable, representaría para Sinaloa un quebrato de por lo menos 10 mil millones de pesos.
Lo anterior, resultado de la diferencia que hay entre los 7 mil pesos por tonelada y el precio de liquidación actual de $4,400 por tonelada.
Muchos de estos productores, cabe señalar, ya liquidaron gran parte de su cosecha ante la falta de políticas públicas, la indiferencia y el abandono por parte del gobierno federal y estatal.
