María Medina/@Maria7Medina
Al recibir la responsabilidad de llevar las riendas del sector agropecuario sinaloense, Juan Enrique Habermann Gastélum se mantiene en la postura de volver a la Secretaría de Agricultura y Ganadería en una dependencia abierta, sencilla y transparente. Un lugar en el que los productores siempre tendrán las puertas abiertas y oídos atentos para escuchar propuestas que coadyuven a mejorar la actividad.
Durante una entrevista para la revista COMENTARIOS, Habermann Gastélum asegura que es momento de aportarle a proyectos que impulsen a los agricultores y ganaderos para que se apoderen de las cadenas productivas. Asimismo, externa que llegó el momento de dejar de estar sentados para empezar a hacer las cosas bien, pues de esto dependerá el recuperar la confianza de la población.
¿Cuál es su visión como secretario de Agricultura y Ganadería?
Más que una visión, quisiera decir que yo también soy productor. Todos los días vivo los problemas de los productores; también me duele lo que viven. La problemática la traigo, la conozco porque la vivo, y mi intención es ver cómo entre todos, y hablo enserio, las organizaciones sociales y privadas con el apoyo de gobierno podamos lograr que la agricultura en Sinaloa sea rentable. Creo que es lo más importante que queremos hacer.
Queremos tener una Secretaría muy transparente con todos los productores, una Secretaría sencilla, eficiente y abierta a todos los productores.
¿Cómo trabajaran para ser una Secretaría sencilla, abierta y transparente?
Primero que nada trabajaremos en ser transparentes en el manejo de los recursos. Quiero que los productores estén seguros de eso, yo no vengo aquí a hacer negocios, ni a llevarme nada que no sea mío, y que quede muy claro.
Traemos varias ideas de cómo ser eficientes en los servicios que da la Secretaría, sobre todo la tramitología. Los productores vienen de muy lejos a traer papeles y si les falta alguno tiene que echar la vuelta y otra vez. Nos acercarnos más a los productores y ver que no tengan que traer papeles y más papeles cada vez que venga.
Yo no tengo inconveniente en sentarme con cualquier productor para platicar y escuchar. Lo que quiero es que se acerquen con ideas, con propuestas; sé que hay muchos problemas y que hay cuestiones pendientes de pagos, pero tenemos que ver qué vamos a hacer hacia adelante, no nada más estar enfocados en lo que nos deben; hay que ver que más hay, porque no hay recursos en la Federación y eso está muy claro.
Tenemos que ver de qué manera con los poquitos recursos que nos otorguen los podemos convertir en proyectos productivos que vengan a generar beneficio a los productores y sus familias.
No digo que hay que dejar de lado los pendientes de pago que tenemos, es una prioridad que tengo; ver de qué manera se cumplen los compromisos, porque hay gente que está esperando ese recurso, eso no lo dejaría nunca. Sin embargo, lo que les he comentado a las organizaciones de productores es que independientemente de que sigamos luchando para que se cubra lo que está pendiente tenemos que ver qué es lo que vamos a hacer para seguir adelante. Quiero recibir propuesta de cómo ven cada zona, qué pueden cambiar, cómo pueden hacer las cosas mejor, cómo pueden bajar costos, de qué otras alternativas de cultivo tienen en sus zonas.
Creo que tenemos que buscar cambiar el concepto de volumen por valor, somos muy buenos para producir mucho y malos para vender. Está bien que seamos buenos productores, pero también hay que vender bien, porque no vamos a salir de donde mismo.
¿Qué tipo de proyectos buscan impulsar?
Traemos un proyecto para el acopio de granos, incluso ya lo mencionó el gobernador (Quirino Ordaz Coppel) en su discurso de toma de protesta. Él mencionó que es indispensable que los productores se apropien de la cadena de producción y cómo se van a apropiar, pues bueno tienen que tener donde almacenar para poder venderlo en el tiempo, ver de qué manera se puede entrar en el tema del valor agregado de los productos.
Hay una propuesta de un sistema de almacenaje en el cual los productores podrían acceder a ser dueños de sus propias bodegas.
En el caso de la propuesta de dar valor agregado a la producción de Sinaloa, ¿cómo incentivarán a los productores para que se industrialicen?
Creo que no hay otro camino. Tenemos que buscar de qué manera le sacamos más ‘raja’ a nuestros productos, y la única manera es brincar al tema del valor agregado, y a lo mejor hay cosas sencillas como el que se reconozca la calidad de nuestro grano, qué es lo que se ha mencionado mucho con la certificación de maíz sinaloense, con la denominación de origen. Son temas que traemos y que tenemos que revisar con la Secretaría de Economía.
Lo de la denominación de origen es un tema que si estamos tomando muy enserio, porque el maíz con el que está referenciado el nuestro no es de la misma calidad.
Hablando de deuda, ¿de cuánto es el pasivo que tienen con los productores agrícolas?
La deuda está más alta de lo que pensábamos. En el tema de copete traemos un pendiente de alrededor de 470 millones de pesos. Se suman lo de la inducción del maíz amarillo, sorgo y trigo. Ahí son alrededor de 180 millones de pesos.
También está lo de cómo se va a llegar a los 3 mil 800 pesos del ciclo 2015-2016. Esto es en el caso de los productores que vendieron por debajo.
Además, traemos el pendiente de la base del maíz (del ciclo Otoño-Invierno 2016-2017), el cual seguimos negociando.
En ganadería, ¿qué planes tiene?
Tramos muchos proyectos, donde el tema principal es la sanidad. De cómo se va a trabajar para recuperar el estatus que se tenía. Ese es el reto que traemos.
Consideramos también que se pueden empezar a formar clúster ganaderos, para favorecer a los productores. Hay mucho que hacer.